Definitivamente ya no esconden la maldad ni el desprecio que sienten por nosotros ciudadanos y/o residentes legales de EEUU.
Mientras millones de estadounidenses viven en la pobreza o peor aún, no tienen en donde vivir, los demócratas se han dedicado en los últimos 3 años y medio, en importar extranjeros.
1. Dejando la frontera abierta para todo el que quiera entre sin ninguna consecuencia.
2. Sirviéndoles de transportación por medio de vuelos clandestinos desde Latinoamérica a los EEUU y transportación terrestre desde la frontera al estado que ellos les dé la gana ir.
3. Estadía en Hoteles de lujo, pagados con nuestros impuestos
4. Tarjeta de dinero para comprar alimentos.
5. En algunos estados, les consiguen apartamentos y hasta le pagan la renta
6. Dándoles números de Seguro Social y permisos de trabajo, etc., etc.
Ciudadanos o residentes legales ni en sueños obtienen tantas ayudas.
Ahora lo último es darles casa y hasta la ciudadanía.
En Oregón se está hablando ya de darles nada más y nada menos que $30,000 para la compra de su primera casa y en California se está hablando de darles un préstamo por el 20% del precio de compra de la casa, que se traduciría hasta $150,000, por el alto valor que una casa promedio tiene en California.
En el caso de California, por ese “préstamo”, el inmigrante ilegal no tiene que pagar intereses ni mensualidad. El ilegal solo pagaría el “préstamo”, si vende la propiedad.
Nancy Pelosi va más allá, diciendo darles la ciudadanía.
Algo claro hay que tener aquí, todas esas ayudas no son porque de verdad ellos aman a los indocumentados, la verdad es que todo esto es parte de su plan para desplazar y reemplazar el ciudadano estadounidense, por una población, que será dependiente del gobierno y que, por gratitud o dependencia, votará siempre por el partido demócrata.
El partido demócrata no tiene ningún interés por los ciudadanos ni tampoco por los indocumentados. Estos últimos están siendo utilizados y no se dan cuenta que están sirviendo al sistema de esclavitud que el partido demócrata quiere imponer. El día que los indocumentados ya no les sirvan para sus propósitos, estos serán descartados.
El partido demócrata solo le importa ellos mismos, los ricos, que son los que los mantienen económicamente y el poder, pero más que nada el poder.